Las cifras del estudio Women in the Digital Age indican que tres de cada diez mujeres en el mundo estudian carreras de tecnología e ingeniería. Y según el estudio de la compañía Crack the Code, en el caso de Colombia menos del 30% de las mujeres trabajan en la industria de la tecnología.
Si bien, se estima que la brecha en el mercado laboral de la tecnología es resultado proporcional de lo que sucede en el ámbito educativo. El panorama ha venido mejorando exponencialmente en los últimos años, la creciente demanda de profesionales, la mayor oferta de programas de estudio, los cambios en los valores corporativos, entre otros factores, han favorecido que las mujeres tengan mayor cabida y mejor recibimiento en los distintos cargos del sector.
Como también lo expresa Deily Gaviria Líder de RRHH en Keyrus, quien vislumbra los años venideros para las mujeres como “¡prometedores!, con certeza con un aumento significativo en participación. Las mujeres hemos hecho un gran trabajo y nos hemos posicionado fuertemente en la industria, lo que sin duda ha abierto muchas más oportunidades y ha impulsado a que más mujeres decidan aportar con todas sus cualidades y potencial al desarrollo tecnológico de las regiones.”
Keyrus, la consultora internacional especializada en inteligencia de datos y transformación digital, considera “la diversidad como un factor importante para la innovación, contar con equipos más diversos y equitativos nos permite generar ideas desde puntos de vista y realidades diferentes, lo que impregna un valor adicional a nuestros procesos de innovación y a nuestra cultura” afirma Gaviria.
Y valores corporativos como estos, son los que permiten aprovechar el talento y las cualidades de mujeres que aportan de manera significativa al crecimiento y el desarrollo de un sector cada vez más humano e integral. Resaltan, además, cualidades que van desde la experiencia, la capacidad de innovar y la resolución de problemas, hasta el empoderamiento, la preparación y el compromiso con que enfrentan cada desafío, como factores determinantes para el desarrollo de los objetivos estratégicos de la compañía.
En el equipo de Liderazgo femenino de Martech de Keyrus, las mujeres son testigos de este impacto. Por ello cuentan cuáles son sus motivaciones, qué las define, cuáles son sus aportes de valor y cómo se proyectan profesionalmente en los años próximos:
A nuestra Tech Lead, la motiva “el saber que con lo que hago puedo presentarle al mundo nuevos y mejores productos y sobre todo mejores experiencias, es lo que hace que sea feliz con mi trabajo“.
Para la Growth Manager, su experiencia en Marketing Digital y su aprendizaje sobre Martech le ha facilitado “empatizar mucho más con los clientes y sus necesidades de negocio, identificando de forma más rápida sus dolores y el camino que deben recorrer para lograr sus objetivos, haciendo aportes desde una perspectiva creativa, estratégica y con un énfasis en los resultados”.
A AMS & QA Lead de México la motiva “ser inspiración en el rol en el que te desempeñas, no solo dentro de Keyrus, sino también haciendo eco con nuestros resultados en el mundo TIC. Hay cosas que ya hemos venido haciendo y debemos fortalecer, tales como el ser inclusivos, mentores de otros, y asegurarnos que exista igualdad en los programas de oportunidades en los diferentes puestos de trabajo”.
A la Project Manager, la motivación se encuentra en “trabajar en equipo, a pesar de las dificultades presentadas: saber que tienes un equipo en el cual puedes apoyarte hace que siempre quiera empezar un nuevo día laboral. También los retos presentados que forjan más mi carácter como profesional y madurar en mi rol”. Y se siente representada por la frase “la práctica hace al maestro”.
Para la CX Consultant, uno de los aportes más importantes desde su rol ha sido “tener una actitud empática y amable, claridad en las conversaciones, velar por el cumplimiento de responsabilidades y hacer siempre las cosas con excelencia”. Y una de sus grandes motivaciones es “servir en todo momento desde mi rol tanto al cliente como al equipo interno”.
Es entonces, para la compañía, un propósito continuo y transversal para todas sus áreas, contribuir al fortalecimiento de un sector más equitativo en Latinoamérica. Por ello, su propuesta requiere principalmente, ser inspiración en el rol que desempeñan, para fomentar el estudio de la tecnología en las nuevas generaciones y con ello ir derrumbando los estereotipos que el área de TI es mayormente para el género masculino. “No hay que hacerse pequeño ante los retos, hay que afrontarlos en miras de un crecimiento para todos, y lograr la equidad que buscamos, en donde el logro sea valorado fundamentalmente por tu capacidad y conocimiento” concluye Deily Gaviria.